
En la naturaleza existe una forma de comunicación veloz y eficiente, a través de las moléculas químicas. Las señales químicas que son enviadas al aire, también se encuentran dispersas en la tierra, en el agua y adheridas a ciertas superficies. Son sumamente importantes para los animales, ya que brindan información sobre el territorio, la presencia de predadores, la disponibilidad de comida, o la posibilidad de apareamiento. Se han observado en los animales silvestres, comportamientos fascinantes que garantizan su supervivencia y refuerzan las relaciones de los individuos de una misma especie, donde el sentido el olfato juega un papel fundamental.
¿Cómo se emiten las señales al medio ambiente?
Los mamíferos liberan al medio sustancias cargadas de mensajes con la orina, las heces, las secreciones vaginales y las glándulas cutáneas. Además, las secreciones contienen feromonas - sustancias que generan una determinada respuesta fisiológica o de comportamiento en otro individuo de una misma especie-. En los animales de compañía, perros y gatos, estas sustancias se encuentran concentradas en distintas partes del cuerpo, como, en la región facial, las almohadillas de las patas, la región mamaria, la región perineal y la zona urogenital.
Algunos grupos químicos que se encuentran en las feromonas, también están presentes en las plantas aromática, de las cuales se extraen los aceites esenciales, por ejemplo, se han descriptos compuestos como el citral (aldehído terpénico) entre las feromonas de alarma en distintas familias de insectos. Esto podría sugerirnos que las plantas y los animales comparten un lenguaje químico, y los animales lo decodifican e interpretan fácilmente.

¿Cómo se perciben las moléculas químicas?
La información química del ambiente es percibida a través de quimiorreceptores situados en distintas partes del cuerpo. En los insectos, por ejemplo, se encuentran gran cantidad en las antenas, y en los mamíferos existen 3 sistemas diferentes de quimiorreceptores interrelacionados entre sí. Los mecanismos de percepción se encuentran clasificados en:
1- El sentido del olfato, a través de la mucosa olfatoria localizada en trufa, hocico, ollares (narinas de los mamíferos)
2- El sentido del gusto, alojado en la cavidad oral en especial en los casos de transmisión en medio acuoso de sustancias no volátiles.
3- El fenómeno de detección (en una posición intermedia entre el sentido del gusto y el olfato) representada por un órgano ultra especializado llamado órgano vomeronasal de “Jacobson” ubicado al final del paladar duro y la cavidad nasal, conectando ambos sentidos.
El sentido del olfato, en los animales domésticos, juega un papel fundamental, no solo en la percepción de su entorno y en la comunicación con otros animales, sino también en la relación con las personas con quienes conviven. Es por ello que deberíamos ser cuidadosos a la hora de elegir los productos de limpieza que utilizamos en nuestro hogar, evitando sustancias químicas nocivas como sprays y aquellas que pueden ser irritantes para las mucosas. Además, conociendo esta forma de comunicación -no verbal- con nuestros animales de compañía, a través de los aromas, podemos utilizar sustancias puras, como son los aceites esenciales para generar un ambiente reconfortante y beneficiarnos de sus propiedades terapéuticas, asesorados siempre por profesionales de la salud, como soporte en tratamientos integrativos.
La difusión atmosférica de sustancias aromáticas puras, como los aceites esenciales, es una herramienta segura, fácil y efectiva para reforzar el vínculo con nuestros perros y gatos, generar bienestar y contribuir a estados saludables.
Algunas de las acciones generales de la aromadifusión atmosférica:
Reducción del estrés y la ansiedad (viajes, tormentas, fuegos artificiales)
Estimulación del sistema inmunitario (durante una hospitalización o después de atravesar una enfermedad)
Aliviar los síntomas del sistema respiratorio
Repelente natural de insectos (pulgas, garrapatas, mosquitos)
Acciones enfocadas a modificar o influir en “conductas específicas” (etología):
Aliviar los síntomas asociados a la “ansiedad por separación” y sus consecuencias como el rascado/grooming excesivo.
Evitar conductas de marcaje y monta
Aspectos importantes para el uso de la aromadifusión atmosférica:
Elección de aceites esenciales 100% puros de calidad garantizada.
Dispositivo: según el tipo de difusor, variará la cantidad de ml o gotas de aceites esenciales a utilizar, tener en cuenta los metros 2 del espacio y el método de difusión del dispositivo.
Tiempo de exposición: se recomiendan exposiciones en periodos cortos de tiempo, una vez al día. Es ideal, al regresar a casa después de todo el día fuera o como rutina tras del paseo. También, se pueden hacer 2 sesiones de 15 minutos al día, en casa o dentro del coche.
Ventilación adecuada: espacios ventilados y dando la opción a acercarse o alejarse de la zona de difusión.
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